Ofrecemos a un espectador un mazo de 52 naipes franceses para que baraje a su antojo.
Seguidamente nos entrega el mazo y lo mostramos al público manteniéndolo con en brazo en alto a la vez que miramos y memorizamos secretamente el último naipe mientras decimos que este mazo tiene muchas características similares a los relojes analógicos.
Depositamos el mazo sobre la mesa y decimos "Voy a anotar el nombre de un naipe en un papel y lo introducré en un sobre".
Damos el mazo al espectador que deberá hacer lo siguiente:
Sin despertar sospechas y con toda naturalidad, pongo el resto del mazo sobre estas ocho cartas.
Por ejemplo, si uno de los naipes es un 4, deberemos poner sobre él 6 naipes ocultos.
Pedimos un voluntario para que abra el sobre y lea en voz alta el nombre del naipe escrito.Debe coincidir con el naipe que muestra el otro espectador.